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Práctica de filosofía, fundamental en época de pandemia

En CAMALEONES Magdiel Olano

PUEBLA, MÉXICO.-  La relevancia de la filosofía hoy radica en que “desde sus orígenes es una práctica cotidiana que tiene como intención la salud de nuestra alma”, consideró el académico Francisco Iracheta Fernández, sobre todo en un escenario contemporáneo cruzado por las incertidumbres que ha dejado la pandemia de Covid-19.

Al hablar da la praxis filosófica para la salud del alma durante el reciente webinar: “El papel de la filosofía en la actualidad: visiones de sanación”, señaló que este sistema de pensamiento es fundamental en la época actual por la crisis sanitaria donde dominan algunos estados mentales como la incertidumbre, el temor, la sensación de pérdida y la ansiedad.

A través de dos ejemplos sustentados en la terapia estoica y la escéptica, el doctor Iracheta, miembro del Departamento de Letras, Humanidades e Historia del Arte de la UDLAP, explicó que la terapia estoica es recomendada para “apaciguar la ansiedad causada por algo que nos rebasa”, mientras que “la terapia escéptica para apaciguar la incertidumbre y la sensación de malestar causado por la idea que algo en sí mismo es malo o bueno”.

Durante la misma conferencia organizada por la Universidad de las Américas Puebla, el académico Charles Maurice Piggott destacó el papel fundamental que juega la filosofía en el siglo XXI, sobre todo entendida como una “filosofía en torno a la sanación en sus dimensiones físicas, psíquicas y ecológicas”.

Abundó que la filosofía ha sido una práctica común de todos los pueblos caracterizada por explorar la naturaleza como seres humanos y el papel en el mundo. Desde este enfoque, dijo, se desprenden tres ejes: la epistemología (responde a cómo sabemos si nuestras ideas son correctas); la ontología (quiénes somos); y la ética (nos dice cómo debemos actuar).

Por otro lado, Héctor Manuel Ramírez, docente de la mencionada universidad, habló sobre los aportes filosóficos a la alimentación y nutrición, ya que “una de las insistencias del sector salud durante esta pandemia ha sido precisamente el consolidar una relación más positiva con los alimentos promoviendo una dieta saludable”.

Mencionó que, si bien los alimentos en la actualidad son vistos como meros productos u objetos de intercambio comercial y la pérdida de sus nutrimientos aunado a la modernidad desencadenó problemas como la obesidad y la desnutrición, “una filosofía de alimentación podría trazar algunos ejes de recomposición de esta experiencia humana tan fundamental”.

Desde la perspectiva de las enfermedades causadas por zoonosis, vinculadas a cierto tipo de intervención humana en la naturaleza, Nayeli Josela Romero López argumentó desde el planteamiento de Arne Naess que la naturaleza se ha entiendo como un otro, “con el que no tenemos relación, simplemente es el escenario en el cual los seres humanos se desarrollan y la única función que cumple es satisfacer sus necesidades”.

Demostrando que esta idea es incorrecta, recordó que casos de zoonosis como el virus Nipah en Malasia, entre muchos otros, que son prueba de que “el ser humano no está desvinculado de la naturaleza, sino que está en una indirecta e inseparable relación con ella, donde si hay un desbalance nosotros nos vemos afectados”.

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