PUEBLA, MÉXICO.- Aunque el cine de comedia en México continúa con la pérdida de iconos y figuras precursoras —como la reciente muerte de Manuel El Loco Valdés— el panorama de este género apunta alentador al futuro por su gran cantidad de producciones, la apertura de plataformas para su visualización y el surgimiento de una nueva generación de realizadores que están tomando la comedia en serio, coincidieron Swald Huerta y Milka Ibáñez Martinovic, las mentes detrás de 24 Risas por Segundo, el único festival de cine enfocado a este género en el país.
Cantinflas, Resortes, Clavillazo, La Vitola, El Mantequilla, Viruta y Capulina, Manolín y Shilinsky, Mauricio Garcés, los hermanos Valdés –Tin Tan, Don Ramón, El Ratón y El Loco–, entre otros, son quizás los personajes que más se reconocen en el ideario colectivo de la comedia nacional, quienes formaron parte de esa generación de actores que sentaron las bases del género en México.
Sin embargo, como en toda evolución y con la ruptura de un “antes y después” en la fórmula de hacer comedia, surge una nueva generación de realizadores que presentan formatos tan diversos que cabe la pena reflexionar.
EL LOCO VALDÉS, PRECURSOR DEL STAND UP EN MÉXICO
En entrevista con LEVIATÁN, el actor y director Swald Huerta consideró que, si bien es cierto que la muerte de El Loco Valdés, acaecida el pasado 28 de agosto, es de hecho la pérdida de un icono para el cine de comedia mexicano en la historia, su partida no representa una pérdida en la producción.
“Se pierde una figura, pero tampoco se pierde una figura que haya producido como actor o como productor o como director actualmente con el cine mexicano. Se va un icono pero no se va a una persona que haya estado produciendo actualmente”.
Al resaltar la destreza del comediante, con un carácter de improvisación, manejo de escenarios y versatilidad, Swald señaló que la habilidad de El Loco lo llevó a ser el precursor del stand up en México, este modo particular de presentar el humor en vivo y con un formato de monólogo.
“Para mí el que inicia el stand up en México es Manuel El Loco Valdés, yo creo que la base de estar una sola persona y tener estos diálogos internos son de un loco, de El Loco”.
Asimismo, hizo énfasis que en la actualidad ningún standupero ha tenido una influencia tan fuerte para emular la comedia del protagonista de Dos tontos y un loco y Los fantasmas burlones, en primera porque carecen de una profesionalización y más bien se han enfocado a buscar un producto de mercado con el humor:
“Ninguno se ha atrevido a dejarse influenciar chido por El Loco, no hemos visto a nadie igual porque están tomando el stand up como otro estilo de comedia (…). El tipo de comedia de El Loco era diferente por la manera y forma en la que estaban preparados para hacer cine, teatro, carpa, televisión y ahorita ninguno puede hacer lo mismo que cine, lo mismo que teatro, lo mismo que tele porque lo único que están buscando es una asquerosa prostitución de los likes y de la gente para tener mayor cantidad de seguidores, y eso es mucho culpa de los productores”.
En ese sentido, el también productor recordó la ruptura que tuvo el género cuando antes se podía hablar de una comedia “inteligente o blanca” al hacer, por ejemplo, una sátira política sin que fuera ofensiva; y un después a partir de la apertura que hubo en los medios y se permitió involucrar las groserías y el albur:
“Creo que sí se vuelve un parteaguas entre el momento en el que se pueden decir groserías y hacer albures y se empieza a liberar un poco más la cinematografía en cuanto a los desnudos, porque antes era mucho más, si no lo voy a decir inteligente, era más inocente, tenías que tener otros recursos y formas de alburear sin que la gente se sintiera ofendida”.
ALENTADOR, PANORAMA DE LA COMEDIA EN MÉXICO
Bajo ese mismo enfoque, Milka Ibáñez indicó que la buena comedia debería tener una reflexión detrás, situación que generalmente no se ve en las carteleras comerciales, pues pareciera que todas las propuestas están hechas con la misma fórmula para que lleguen a taquilla y no para hacer reflexionar.
Si bien está surgiendo una nueva generación de comediantes que incluso están posicionados como standuperos o en plataformas digitales como el Tik Tok, Ibáñez Martinovic mencionó que convendría una profesionalización de los actores para conformar una línea de comedia nacional que aporte más propuestas y otros modos de hacer comedia, tal como apuntan los contenidos del festival 24 Risas por Segundo.
El par de cineastas argumentó que la comedia en México, al igual que el cine nacional, tienen un futuro alentador ya que hay producciones, se está viendo más cine mexicano en el mundo, hay más plataformas para disfrutarlas y en la búsqueda de acierto y error de hacer “puro pastelazo” bajo un esquema comercial, este género está mutando a una nueva manera de presentar el humor que va a invitar a los distribuidores a aceptar otro tipo de comedia.
“Creo que el cine mexicano va a funcionar con esta tendencia mundial y esperemos que tenga ese despunte de un cine de comedia mucho más negro, ácido y crítico que necesita el país”, concluyó Swald Huerta.