SANTA MARÍA TONANTZINTLA.- Dayr Al-Barsha se encuentra a 200 kilómetros de El Cairo, Egipto. En ese lugar, ubicado en la margen este del Nilo, los arqueólogos han encontrado miles de fragmentos de piedra, cerámica y madera, y ahí el mexicano Roberto de Lima Hernández ha aplicado sus conocimientos computacionales para armar virtualmente con ellos, como si fueran rompecabezas, tumbas y otros objetos de miles de años de antigüedad.
Roberto de Lima es originario de Amozoc, Puebla, y egresado de la maestría en Ciencias Computacionales del Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica (INAOE). Actualmente realiza el doctorado en el grupo de investigación de Geomática de la Universidad Católica de Leuven, Bélgica (KU-Leuven), donde colabora en el proyecto “Puzzling tombs” junto con Toon Sykora (https://www.arts.kuleuven.be/dayr-al-barsha).
En entrevista telefónica Roberto de Lima nos cuenta que estudió la licenciatura en Electrónica en la BUAP y, como le llamaban mucho la atención el diseño de arquitectura por computadoras y sus aplicaciones en el área de visión por computadoras y en sistemas en tiempo real, y además le gustaba mucho programar, decidió estudiar la maestría en Ciencias Computacionales en el INAOE.
“Como se trata de un sitio restringido, no está abierto al turismo, los egiptólogos han recopilado y excavado mucha información desde artefactos de cerámica hasta de madera de sarcófagos. Lo que han encontrado en su mayor parte han sido miles de bloques de piedra decorados. La hipótesis que tienen es que de alguna u otra forma estos fragmentos de piedra pueden unirse y, como tienen tantos fragmentos, no lo pueden hacer manualmente, además de que solo trabajamos dos meses en el sitio. De aquí nació la idea y surgió este proyecto, que es básicamente desarrollar algoritmos de visión por computadora para automáticamente encontrar uniones entre fragmentos y poder reconstruir el sitio y saber cómo lucía hace miles de años. El primer paso consiste en digitalizar toda la información por medio de los escáneres que comenté y el segundo paso es desarrollar los algoritmos, que es donde entra la investigación”.
Roberto de Lima agrega que esto se puede aplicar en cualquier parte del mundo en donde haya fragmentos, artefactos rotos de cerámica y piedra, siempre y cuando se tenga un modelo tridimensional de los artefactos (https://www.arts.kuleuven.be/dayr-al-barsha/Zone_2)
Finalmente, Roberto comenta que a futuro le gustaría desarrollar investigación en el ámbito empresarial: “Aquí, además de la investigación, trabajamos en consultoría con empresas porque adquirimos y procesamos información en tercera dimensión.