MÉXICO.- El periodismo literario en México se ha convertido en una especie de animal fantástico en peligro de extinción del que ya casi no se habla y poco se lee, señala el escritor Antonio Ortuño, quien recientemente publicó El canibal ilustrado.
Y es que frente a la cada vez más acelerada información e inmediatez de los medios de comunicación y sus expectativas en obtener mayor rating, este tipo de escritura no tiene cabida, sobre todo si se piensa en que el periodismo cultural se encuentra de por sí en una posición compleja.
“Creo que se ha vuelto un animal mitológico que se le ve muy poco y no por culpa del talento, sino porque la mayor parte de los medios lo que quieren son clicks, y cuando el periodismo se reduce a eso las opciones y los espacios para el periodismo literario, se reducen”.
En una videoconferecia ofrecida como parte de los Eventos Gandhi en línea, el autor definió al periodismo literario como aquel que se escribe con un criterio narrativo y verbal que tiene más que ver con el de la literatura que con el lenguaje más o menos “funcional” y, en el peor de los casos, “arteroesclerótico de cierto periodismo”.
“Yo creo que no sólo es una especie en peligro de extinción, sino que ya es casi como el yeti, es casi un animal fabuloso el periodismo literario en México, no el periodismo cultural que es una cosa distinta”.
El ganador del V Premio Ribera del Duero por el libro de cuentos La vaga ambición, precisó que existe una diferencia entre éste y el periodismo cultural; y señaló que para que el segundo tenga mayor auge tendría que haber en un inicio una mayor inversión para educación en la cultura, lo cual exigiría la capacitación de maestros en este rubro.
“Va a se difícil que en México existan públicos interesados en la cultura mientras no haya educación en la cultura y mientras los chicos en la escuela vean la literatura, la pintura o la música como tarea” o como una situación que el maestro exige.
BITÁCORA DE LOS ENCUENTROS CON LA LITERATURA MEXICANA
El autor recientemente publicó El caníbal ilustrado (Dharma Books), obra que recopila el trabajo de 22 años de escribir artículos y columnas en periódicos, revistas, suplementos y medios digitales, y a través de los cuales exhibe las diferentes etapas, tópicos y el sentido crítico por el que ha transitado.
Ortuño dijo que la obra se trata de una bitácora con los encuentros y desencuentros con la literatura mexicana que ha tenido como periodista y escritor.
El también autor de Olinka, añadió que quería analizar la forma tropicalizada de la literatura que se practica en México y burlarse de los criterios eurocéntricos para los cuales la gran literatura sólo se escribe ciertas grandes capitales del mundo.
Asimismo, señaló que sin duda éste ha sido una de sus obras más complejas, en principio por la labor de selección de los escritos incluidos y las horas invertidas en relecturas y edición, la cual supera a otras publicaciones.
EL APUNTE
Antonio Ortuño ahora se encuentra en la escritura de un libro que tiene que ver con música, particularmente con el heavy metal, el cual se espera esté listo antes del próximo año; además adelantó que está trabajando en una obra de literatura infantil.