PUEBLA, MÉXICO.- Las obras del Barrio Smart de Santiago y el Parque de las Ninfas se llevaron a cabo sin que se tuvieran los permisos correspondientes, pues estos fueron expedidos una vez que concluyeron los trabajos en esta zona.
Por medio de diversas solicitudes de información, se requirieron a las secretarías de Infraestructura, Movilidad y Transportes (SIMT) y de Medio Ambiente y Ordenamiento Territorial (SMAOT), los documentos relacionados con este proyecto, en los cuales se reflejan las irregularidades en cuanto a las fechas de ejecución.
De acuerdo con el contrato OP/ADE005/SIMT-20181284, la empresa Dauco Diseño y Construcción S.A. de C.V. tenía entre el 24 de agosto y el 28 de noviembre de 2018 para realizar la intervención denominada “Proyecto Integral para la Construcción de Barrio Smart en el Municipio de Puebla”.
Esta obra, por la cual la empresa cobró 15 millones 819 mil 108.2 pesos, abarcaba el polígono de la 15 Sur entre la 17 y 23 Poniente, y la empresa estaba obligada a generar el proyecto ejecutivo, rehabilitar los parques Santiago y las Ninfas, instalar alumbrado público e implementar tecnologías en esta zona.
Las obras se llevaron a cabo en el período establecido, pues previo al cambio de administración municipal en octubre del año pasado, Luis Banck Serrato hizo un recorrido por la zona acompañado del entonces titular de la SIMT, Xabier Albizuri Moret para supervisar el avance de los trabajos.
Sin embargo, llama la atención que la “Resolución del Informe Preventivo de Impacto Ambiental de la obra denominada Proyecto integral para la construcción de Barrio Smart en el municipio de Puebla” tiene fecha de autorización del 23 de noviembre, es decir cinco días antes de que se venciera el plazo para los trabajos.
A DETALLE
En el documento, registrado con el número SDRSOT CGMA 2261/2018, se detalla que “la obra consiste en rehabilitar el Parque de las Ninfas y Parque de Santiago ubicadas en la mancha urbana de la capital del estado de Puebla. Así mismo se rehabilitará la Avenida 15 Sur, en el tramo que comprende desde la Av. 17 Pte. hasta la Av. 23 Pte.”, lo que significa que se trata del mismo proyecto.
Como parte de las condicionantes que se establecieron para poder realizar los trabajos, se prohibió el derribo injustificado de árboles en estos parques, además de que se requirió la entrega de mil 447 credos blancos al Parque Flor del Bosque, como “medida compensatoria”.
Cabe mencionar que en este documento se detallan de manera más clara las labores a ejecutar como parte de este Barrio Smart, como fue la rehabilitación de bancas, botes de basura, carpeta asfáltica, canchas de usos múltiples y deportivas, instalación de postes y luminarias LED, la construcción de guarniciones, banquetas y cruceros viales elevados, y la eliminación de líneas áreas de electrificación, sustituyéndolas por tuberías subterráneas, lo cual costó 15.8 millones de pesos.
Y aunque esta resolución se aprobó en los días previos a la conclusión de los trabajos, destaca que el Plan de Manejo de Residuos de Construcción, Mantenimiento y Demolición, tiene fecha del 21 de enero de este año, es decir, dos meses después de que se venció el plazo del contrato.
En dicho oficio, registrado con el número SDRSOT CGMA 0109/2019, además se precisa de manera puntual que el proyecto integral para la construcción del Barrio Smart “cuenta con Factibilidad de uso y Destino de suelo oficio SDUS/DDU/16602/10/18, de fecha 11 de octubre de 2018, emitida por la Dirección de Desarrollo Urbano del H. Ayuntamiento del municipio de Puebla”.
Es decir, el permiso correspondiente por la administración municipal fue expedido dos días antes del recorrido de supervisión en el que participó el entonces alcalde Luis Banck.
Esto implicaría que los trabajos se desarrollaron sin contar con los permisos correspondientes, y que estos fueron expedidos una vez que se terminó la intervención en la zona.
