PUEBLA, MÉXICO.- En el año 6912 probablemente haya una revolución y los humanos sean ahora las mascotas, quizás allá por el 3225 el mundo sea un lugar donde no quepa la amargura, o tal vez para el 2050 éste sea un planeta sin contaminación, porque “el futuro a veces es como lo imaginaste y a veces no como lo esperaste”.
Estas son algunas de las reflexiones a las que llegaron pequeños escritores poblanos en Futurotopías, una antología que reunió el trabajo de niños que fueron invitados a soñar e imaginar el futuro a través de la escritura.
Se trata de un libro ilustrado que reúne 15 cuentos resultado del “Concurso de Cuento Corto Futurotopías, para niñas, niños, niñes y jóvenes”, el cual lanzaron en conjunto el Foro Cultural Karuzo y Ediciones Ají, y donde ambos colectivos decidieron prestar sus oídos y corazón para escuchar a los pequeños.
“Pensamos que la humanidad necesita imaginar otros futuros posibles para transformar su realidad. Y ya que el sueño viene antes de la creación, nos parece que al soñar e imaginar, al hablar de lo que deseamos en lo más profundo del corazón, será posible encontrar otras formas de ser y hacer”, señalaron los organizadores.
“Contami… ¿qué?”, “El tanque de la paz”, “Martópoli”, “Isabel y el futuro”, “El otro mundo”, “Sadira”, y “2837” son algunos de los cuentos que forman parte de la obra, donde la infancia narró futuros basados en temas como la tecnología (y cómo usarla para bien), relaciones familiares y humanas, inventos para vivir mejor, la vida de los animales y mascotas, los conocimientos de sus padres, abuelos o ancestros, y de la comunidad.
Así, los narradores menores de 18 años describieron escenarios con sociedades perfectas donde no haya animales maltratados, la capa de ozono esté regenerada, un lugar donde la guerra culmine en paz y no haya amargura, o tener la oportunidad de regresar en el tiempo para construir un mejor futuro.
A DESTACAR
Itzel Sánchez, miembro del Foro Cultural Karuzo, dijo que el libro próximamente será editado, pero actualmente se encuentra en formato PDF, por lo que puede ser solicitado a la Editorial Ají que se pueden contactar en redes sociales Instagram y Facebook/ Ediciones Ají.
“Tenemos un libro ilustrado, que nos da mucho esperanza, siempre aprendemos de la infancia (y) tenemos que tener oídos y corazón para escucharles”.
