MÉXICO.- “Prácticamente todo lo que yo he escrito ha tenido que ver con tratar de recrear lo que él hizo con el lenguaje”, confesó la escritora veracruzana Fernanda Melchor al hablar de la trayectoria de más de medio siglo que ha tenido en las letras el reconocido mexicano José Agustín, autor de novelas como La tumba, De perfil y Cerca del fuego.
Durante la segunda conferencia virtual en conmemoración al acapulqueño, organizada por la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) de Cuajimalpa, Melchor reveló el carácter tan profundo que marcó en su escritura las lecturas de los libros de José Agustín, los cuales, dijo, fueron una “revelación” cuando los descubrió en la biblioteca pública de Veracruz siendo ella apenas una adolescente.
Acompañada por Julián Herbert, Wenceslao Bruciaga y el hijo del homenajeado, Andrés Ramírez, la autora de Aquí no es Miami destacó la sinceridad, franqueza, originalidad y una suerte de juventud eterna que el escritor logra impregnar en sus textos.
José Agustín, consideró, es un escritor que inauguró una posmodernidad no sólo por su humor irreverente, satírico y burlón, sino también “por este desmadre que se trae con el lenguaje”.
“Yo creo que esta suerte de irreverencia que se lleva al lenguaje y que marca una una actitud rebelde y contestataria de tomar la baja cultura, tomar todo lo que no es literario y convertirlo en literatura”.
De entre todos los libros del escritor, destacó Se está haciendo tarde (final en laguna), una novela que describió como una de las novelas más arriesgadas de la literatura mexicana del siglo XX, por la voz literaria capaz de atravesar la superficie de lo cotidiano, lo banal, el instante.
“Quisiera destacar sobre todo que la fuerza de José Agustín, su energía rabiosa en su narración enloquecida y vertiginosa, siempre me atrajo como lectora, por supuesto como escritora; no he sino tratado de seguir sus pasos y justamente volverme loca con el lenguaje y copiar siempre esta actitud irreverente por la misma rebeldía y juguetona”.
Por su parte, Julián Herbert, comentó que Agustín es una “autor de autores”, es decir, un escritor que ha inspirado a toda una generación de nuevos creadores de literatura mexicana, que a su vez han dado pauta a la existencia de nuevos lectores.
“Creo que es una gran inspiración para quien quisiera ser escritor, y eso me parece súper interesante en un autor, la sensación de (decir): ‘Yo quiero hacer lo que hace ese güey”.