De unos años para acá el formato del mockumentary (documental falso) se ha explotado hasta el cansancio en series de comedia: The Office, Parks and Recreations y Modern Family son ejemplos de programas que utilizan este formato para contar sus historias.
Hay otros casos en los que sólo se recurre a este esquema en episodios específicos, siendo Community quien se lleva las palmas con el mejor uso en diversos capítulos.
Sin embargo, en el cine es poco usado, hay ejemplos de películas de miedo que recurren a este formato para atrapar audiencias, pero es más que nada un género explotado en la comedia.
Es bajo este formato que en 2014 se lanzó la película What we do in the shadows, escrita y dirigida por el equipo formado por Jemaine Clement (Flight of the Concords) y Taika Waititi (Thor Ragnarok), en donde narran la historia de un grupo de vampiros que tienen que lidiar con la vida cotidiana del mundo moderno en Nueva Zelanda.
Lo que de por si suena como una premisa un tanto extraña se convierte en una película de humor negro, que no tiene miedo de burlarse de los estereotipos de vampiros que abundan en la cultura popular, que se convirtió rápidamente en una cinta de culto.
En lo personal, la película me enamoró desde la primera escena, desde el vestuario, el diseño de la casa en la que viven los vampiros, y claro, el humor.
Por eso, cuando hace unos meses me topé con la noticia de que FX estaba en proceso de producción de una serie americana basada en la película, tuve mis reservas, y mucho. En general, me opongo a que películas las conviertan en series, en especial aquellas que ya tienen su base de fans.
Sin embargo, mis temores fueron infundados, por fortuna. La serie no sólo captura la esencia de la película original, con este humor irreverente, negro y un tanto sádico en ocasiones, sino que aprovecharon algunos elementos para hacer crecer un poco más la historia.
Por ejemplo, en la versión televisiva, al igual que en la película, se presentan a tres vampiros principales, pero en esta ocasión se trata de dos hombres y una mujer: Nandor, Laszlo y Nadja, siendo estos dos últimos pareja.
En la versión americana se agregó a Colin, un “vampiro de energía”, es decir, una nueva versión de esta criatura mítica que no sólo puede caminar de día, sino que no toma sangre, él vive de chuparle la energía a las personas, ya sea aburriéndolas o haciéndolas enojar.
Para que sea fácil ubicar al personaje: imagina a una persona con la que trabajes, la persona que siempre llega a quitarte el tiempo con comentarios sin sentido, que habla hasta que te cansas o hasta que te hace enojar y explotas. Ese es Colín. Aprovechar la realidad godín para introducir a este vampiro se me hizo una idea brillante.
Y si la serie mantiene la esencia de la película se debe a que tanto Jemaine como Taika han participado en la producción, escribiendo y dirigiendo capítulos, lo cual me da la tranquilidad de saber que si ellos están pendientes de lo que se hace, esto será de calidad.
Incluso, en el séptimo capítulo de la primera temporada, del cual no daré detalles para evitar spoilers, hay una congregación de vampiros, entre los que aparecen los tres de la película, interpretados, claro está, por Jemaine y Taika, lo cual me hizo demasiado feliz porque entonces no estamos hablando de una reimaignación de la historia original, sino que forman parte de un mismo universo, lo cual abre la puerta para muchas cosas que mi pequeño corazón geek desea.
