Fotografía: Especial

AMLO, promete menos y pide más ayuda para su “revolución”

En PUEBLA Josué Mota

PUEBLA, MÉXICO.- Este lunes se cumplen sus primeros 100 días de gobierno y se muestra preocupado por el hecho de que los censos para implementar sus principales programas de beneficio a la población no se han aplicado del todo, así que pidió a los delegados federales que dejen la “politiquería” y se dediquen a avanzar en la entrega de los recursos económicos. Dice que se necesitan trabajar 16 horas al día, que “no se puede tener el horario de un burócrata” y es que para Andrés Manuel López Obrador, presidente de México, “esto es la revolución”.

La frase del mandatario llega apenas una horas después de que se publicara en Proceso una declaración similar del titular del Fondo de Cultura Económica (FCE), Paco Ignacio Taibo II, “hay una revolución en este país, hombre, ya que se enteren!”, dijo el autor de Los libres no conocen rivales.

Sin embargo, ayer López Obrador lo dijo no frente a un periodista sino frente a 15 mil personas que se reunieron en Centro Expositor. El primer acto multitudinario de AMLO en un espacio cerrado en Puebla, por cierto.

SIN MUCHO CAMBIO

Algunas cosas de los eventos frente a miles y miles de personas de López Obrador parecen no cambiar. La gente se sigue arremolinando para tocarlo, abrazarlo y besarlo; le piden ayuda, lo vuelven a abrazar, le piden un segundo para disparar la cámara del celular, lo besan, las mujeres lo besan mucho. Aún le gritan a la menor provocación “¡Es un honor estar con Obrador!”. Las poco más de dos horas que han esperado para verlo y escucharlo parecen no hacer enfadar a nadie en el lugar, quizá solo a algunos reporteros.

Pero algunas otras cosas sí que han cambiado: ahora promete menos cosas, ahora pide más ayuda, “el cambio es responsabilidad de todos”, dice una y otra vez. Le duele, dice, encontrar a gente en los mitines que le pide ayuda porque la ayuda no ha llegado, y es ahí cuando suelta el semidisfrazado jalón de oreja para el delegado en Puebla, Rodrigo Abdala, no quiere le hablen de “politiquería” quiere que terminen el trabajo que les ha encomendado.

Ya se han generado 7 mil 200 empleos con el programa de reforestación, ya hay 350 mil adultos mayores inscritos para recibir su pensión duplicadaen Puebla, pero aún no se concluye el censo de las becas para estudiantes, ni el de Jóvenes Construyendo el Futuro, ni el de los niños en estancias infantiles.

Tiene, le cuenta a los que lo escuchan, primordialmente gente adulta y de la tercera edad, un especial cariño por Puebla porque su esposa estudió y tiene familia aquí. Además la encargada de las becas Benito Juárez, Leticia Ánimas, es poblana; la titular de la Secretaría del Bienestar, María Luis Albores, vivió la mayor parte de su vida profesional en Puebla. Todo eso le gana más aplausos. No deja de impresionar la genuina atención con los que la gente lo escucha. Ha hablado por 56 minutos y la gente no se levanta de sus sillas ni para estirar las piernas.

Una vez más vuelve a pedir el apoyo de la gente para llevar a cabo “la cuarta transformación de nuestro país”, y les dice “¡Esto es la revolución!”.

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