PUEBLA, MÉXICO.- Más de un año después de que los diputados de la 59 Legislatura, donde el grupo morenovallista tuvo la mayoría en el Congreso local, se negaron a tipificar el tema de la violencia política de género, ahora este mismo grupo demandó en el pleno del legislativo poblano el reconocimiento de la participación política de las mujeres.
Fue en la sesión de instalación de la Mesa Directiva de la 60 Legislatura, previo a que los diputados electos rindan protesta el 15 de septiembre, que los representantes de los partidos que conforman la alianza Por Puebla al Frente -PAN, PRD, Movimiento Ciudadano, Compromiso por Puebla y Nueva Alianza- demandaron que este organismo fuera integrado solamente por mujeres.
Esta postura fue expresada por Marcelo García Almaguer, excolaborador de la administración de Rafael Moreno Valle y virtual coordinador de la bancada de Acción Nacional (PAN), quien dijo que si de por sí la integración de la próxima Legislatura ya es histórica por haberse alcanzado la paridad de género “es momento de darle fuerza y voz a las mujeres”, por lo que propuso una planilla para la Mesa Directiva conformada sólo por mujeres.
Sin embargo, la petición únicamente buscaba hacer contrapeso a la propuesta presentara originalmente por la coalición Juntos Haremos Historia, que había asignado cuatro posiciones para los diputados de esta alianza, uno al Partido Verde Ecologista de México y otra al Partido Revolucionario Institucional (PRI).
A cambio, García Almaguer propuso dejar dos posiciones a Juntos Haremos Historia, una para el PRI y tres para su grupo.
Esta intención no pasó desapercibida por las diputadas de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), quienes subieron a tribuna para reclamar respeto al grupo que encabeza el PAN.
“No nos ocupen a las mujeres como un tema político cuando no han luchado nuestras peleas, pido respeto, porque a muchos de los que hoy veo pidiendo paridad no los he visto cuando en Puebla hemos pasado por feminicidios y problemas de equidad”, expresó Nora Merino Escamilla.
A esto se sumó Vianey García, quien reviró que si los morenovallistas tienen tanto interés en la equidad de género, por qué ninguna de las bancadas de Por Puebla al Frente está presidida por una mujer; “no nos vengan con cuentos baratos de que nos quieren usar para cumplir con cuotas”, retó.
ABANDONAN SESIÓN
Usando el tema de la falta de inclusión de las fuerzas políticas y de mujeres, los diputados de la alianza Por Puebla al Frente -que postuló al gobierno del estado a Martha Erika Alonso Hidalgo-, abandonaron el pleno legislativo antes de la votación, por lo que ni ellos mismos apoyaron la propuesta que presentaron, la cual fue rechazada.
“Hoy Morena votó en contra de las mujeres” criticó García Almaguer, al lamentar que “no se haya hecho historia” con la instalación de una Mesa Directiva de puras mujeres.
Sin embargo, el diputado electo, quien también fue delegado especial del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PAN, pareció olvidar que el año pasado ingresaron al pleno del Congreso dos iniciativas para la tipificación de la violencia política de género, las cuales fueron bloqueadas por la bancada de su partido.
En su momento fue el panista Jorge Aguilar Chedraui, en su calidad de presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política, quien justificó que no se incluyera esta figura en el Código Penal o en el Código de Instituciones y Procedimientos Electorales, pues no se tenía una legislación en la materia a nivel federal.
La primera propuesta fue presentada por la diputada Lizeth Sánchez Pérez del Partido del Trabajo el 1 de junio de 2017, y posteriormente Socorro Quezada Tiempo ingresó una iniciativa similar el 26 de julio del mismo año, en donde se establecía la definición de la violencia política de género, cómo identificarla y sanciones en contra de los agresores.
Sin embargo, después del estudio de ésta, la Comisión de Gobernación y Puntos Constitucionales -presidida por Susana Riestra Piña, diputada de Nueva Alianza-, decidió imponer la responsabilidad de atender este tema directamente al Instituto Electoral del Estado (IEE).
De este modo, lo que empezó como reformas a diversas leyes estatales, se convirtió en un mero exhorto a la autoridad electoral, el cual careció de fuerza pues al no contarse con un marco jurídico se dificultó la lucha contra la violencia política de género.
Además, la iniciativa que hizo obligatorio el principio de paridad de género vertical y horizontal en las candidaturas que se postularon en la elección de este año -y que ayudó en gran medida a que por primera vez se tengan 20 diputadas-, fue presentada por la diputada del PRI Silvia Tanús Osorio y no por los partidos que ahora reclaman la inclusión de la mujeres.