PUEBLA, MÉXICO.- La inmediata liberación de Beverly Vega Oropeza es la solicitud que organizaciones feministas hicieron ante la detención en Puebla de esta joven estudiante originaria de Veracruz, quien tras defenderse de una supuesta agresión por parte de un conductor de Uber fue asegurada por autoridades estatales.
La mujer de 24 años de edad, de acuerdo con los últimos reportes, se encuentra en el Centro de Readaptación Social (Cereso) de Cholula, pues el chofer exige una suma de 100 mil pesos para acordar la reparación del daño y que se le retiren los cargos.
Información de colectivas feministas como Redefine Puebla y Somos Fuego señala que Vega Oropeza llegó a Puebla a hacer una residencia en una empresa.
Fue el pasado 21 de enero cuando la estudiante del Instituto Tecnológico de Tierra Blanca, en Veracruz, salió de su lugar de estancia en Puebla con rumbo a dicha empresa, por lo que solicitó el servicio de transporte privado Uber.
Al llegar a su destino, según los hechos narrados por las colectivas, el conductor puso los seguros del vehículo y subió los cristales, lo cual alertó a la pasajera.
Tras solicitar al menos tres veces al conductor que le permitiera salir del vehículo, éste “le dio un manotazo. Entonces ella, en defensa, lo atacó. Como pudo, salió del carro, pero el conductor la siguió. Incluso, cuando llegó la Policía, éste la tenía sometida”.
De acuerdo con el reporte de Redefine, al llegar la Policía del estado, detuvo a la joven y la trasladó al Complejo Metropolitano de Seguridad C5 de Cuautlancingo, donde permaneció hasta el domingo, cuando la trasladaron a la Casa de Justicia de San Andrés Cholula.
Este lunes Beverly Vega se presentó en audiencia, después de la cual fue trasladada al Cereso de San Pedro Cholula.
EL APUNTE
Este día, con el hashtag #JusticiaParaBeverly, colectivas en redes sociales se han manifestado en contra de esta detención, exigiendo una investigación con perspectiva de género.
Asimismo, pidieron un alto a la criminalización de las mujeres, quienes continúan en la búsqueda de herramientas de defensa ante posibles casos de agresión.
“Beverly pasó de ser víctima a agresora, pues actuó en su legítima defensa contra las agresiones y violencias a las que el conductor la expuso”, señalaron.