MÉXICO.- Siete de los libros más importantes del escritor sinaloense Dámaso Múrua, considerado el cuentista más destacado del Siglo XX en las letras mexicanas, serán reeditados en formato popular y se imprimirá una obra inédita del oriundo de Escuinapa, creador de “El Güilo Mentiras”.
De entre las más de 30 obras que creó Dámaso Múrua durante su vida, las elegidas por el Fondo de Cultura Económica (FCE) para reeditarse fueron Los candiles de la calle, El Mineral de los Cauques, El Güilo mentiras, Colachi, Vacum totoliboque, Las playas de las cabras, Club escarlata y Las mujeres primero, mismas que se esperan sean lanzadas a finales de este año.
Yuri Múrua, hijo del autor, aseguró que este proyecto suma una importante oportunidad para autores, destacó la participación de dos escritores de Sinaloa: Georgina Martínez Montaño y Samuel Parra, quienes tendrán la responsabiilidad de realizar el prólogo de un par de libros de Múrua.
Parra, originario de Mazatlán, se encargará del prólogo de Los candiles de la calle, editado por El Colegio de Sinaloa en el 2001; mientras que Martínez Montaño escribirá el de Las playas de las cabras.
“Nosotros (los escritores) nos debemos al lenguaje. La palabra es agua y cada historia, el río que las lleva. El escritor es quien domina la corriente. Dámaso Múrua era un río que quiso ser mar a través de la literatura”, contó al respecto Parra.
“A través del espejo”, proyecto de Samuel Parra que busca edificar una “nación de literatura”
EL EXTINTO DISTRITO FEDERAL
Los candiles de la calle es una serie de crónicas sobre el extinto Distrito Federal, hoy convertido en la Ciudad de México. Es la metrópoli más grande del hemisferio occidental, la más antigua de América, una de las 10 más ricas del mundo. Tiene más habitantes que la mayoría de los países de la Tierra, pues aquí viven más de 20 millones de personas. Una aglomeración descomunal de sabores, sonidos y olores que mezclan la riqueza con la pobreza, la violencia y los boyantes negocios.
“México no es una ciudad. Es, quizá más que ninguna, lo que ahora son las ciudades desmedidas: una federación de pueblos grandes unidos por esas cosas que unen a esas federaciones. Antes era un dios, un rey, un límite geográfico; ahora es una bandera, un equipo de futbol, una moneda, una ilusión –y siempre las variaciones de una alimentación y de un idioma. México es tan diversa, tan inabarcable”, explicó Parra.
Para Dámaso, comentó el autor mazatleco, escribir era erosionar el idioma en la forma que el idioma lo admite. “Es decir, maltratar el verbo, fustigarlo, estrangularlo… para resucitarlo después, como el Evangelio porque en el principio fue el verbo y la mentira”.
“La realidad no es real para mí hasta que no se haya pasado por el tamiz de las palabras. Por eso, supongo que escribo con el fin de imaginarme la realidad totalmente real. El arte crea la vida, dice Henry James, y así es”, añadió el también autor.
EL LEGADO DE ‘EL GÜILO’
En honor al escritor escuinapense, quien falleció en 2019, se aprobó por la 63 Legislatura el acuerdo de la Junta de Coordinación Política, para la creación y asignación de la denominación de Corredor Cultural “Dámaso Murúa Beltrán”, espacio ubicado a un costado de las Salas A y B dentro del Congreso de Sinaloa.
El acuerdo aprobado faculta a las Comisiones Permanentes de Educación Pública y Cultura, y de Biblioteca, Cultura Parlamentaria y Asuntos Editoriales, para que promuevan en coordinación con otras instituciones de educación y cultura ante el FCE, la edición en formato popular de la obra del escritor.
“Dámaso Múrua nos dejó un legado cuyo valor no puede medirse pero sí ejecutarse: aprender a leer y a escribir sobre nuestro pueblo, ese pueblo que es sueño; calca de cosas orgánicas”, dijo su hijo Yuri.