MÉXICO.- En la VII Sección de Juchitán de Zaragoza, Oaxaca, surgió hace 12 años Juchirap, agrupación de rap bilingüe español y zapoteco, la cual habla de la comunidad y los retos que esta enfrenta.
Cosijopi Ruiz, fundador de la agrupación, menciona en entrevista que Juchirap es un proyecto que busca dar a conocer aspectos relevantes de la cultura zapoteca, la cual abarca sus creencias, lengua, tradiciones y costumbres, a través de la música y la rima improvisada: característica de los raperos.
Considera que el rap es un medio para dar a conocer los conocimientos ancestrales e ideología de los pueblos con presencia indígena; de esta forma, cantan y cuentan las tradiciones y costumbres de Juchitán, Oaxaca, para así compartir con el mundo un pedazo de su ser.
“Nosotros hacemos rap, pero no cualquier tipo de rap: nuestro rap es bilingüe, en español y zapoteco. Junto con mi primo Antonio (Sánchez Ruiz) nos gustaba mucho escribir: siempre nos juntábamos aquí, en el barrio, en el callejón. Nos gustaba hacer cosas culturales como entrar a danza, hacer obras de teatro y todo eso”, narra en entrevista.
Sin embargo, recuerda que su vida y la de su primo fue muy difícil desde la infancia, tanto en su hogar como en el barrio, ya que es una zona conflictiva, y todo lo que ocurría “nosotros lo absorbimos, o sea, vimos violencia, vimos de todo”.
Este ambiente, dice el entrevistado, lo llevó a vivir una fase de depresión; ante ello, se le recomendó escribir en una libreta todo lo que le sucedía, lo que sentía, lo que veía, para después tratar de dar sentido a lo que escribía.
El joven cursaba entonces el primer grado de secundaria, donde conoció amigos que le contaron también los problemas que enfrentaban en sus familias: todo eso lo absorbía y escribía. Un día, un tío de Cosijopi y de Antonio, a quien le gustaba escuchar música, vio que estos jóvenes pasaban los días con la cabeza agachada, les regaló un disco del rapero puertorriqueño Vico C y fue así como conocieron el rap.
“Ese rapero narra lo que es una vivencia de lo mismo que nosotros estábamos viendo; nosotros empezamos a escribir así, igual mi primo escribía lo que sentía y a veces nos compartíamos la letra, tratábamos de darle ese tono de rapero”.
Al principio, cuando no tenían con qué grabar, mostraban sus creaciones en el barrio, en el callejón donde se juntaban con los demás, presentando en sus letras las historias y experiencias que la misma comunidad contaba.
Al tiempo que crecían, adquirieron más práctica y su lírica también fue madurando.
Cuando pudo tener una computadora en 2013, que fue un regalo de su papá y sus tíos, y con el afán de grabar, Cosijopi Ruiz cuenta que compró un micrófono de los que se pueden adquirir en una papelería y, junto con su primo, grabaron su primera canción: una que, dice, es “muy chistosa, que habla sobre cómo nos íbamos a llamar”. La primera opción fue Novatos rap, por su nobel trayectoria; sin embargo, no terminó de convencerles, así que dijeron: “Si somos de Juchitán y hacemos rap, pues nos vamos a llamar Juchirap”, quedando esta opción como el nombre del grupo.
Posteriormente, en 2014 grabaron su primera canción con video: En mi corazón palpita, la cual subieron a Internet, y con ella obtuvieron más reconocimiento.
La necesidad de cantar los llevó a tocar varias puertas, sobre todo de escuelas, para pedir un espacio; sin embargo, se les decía que no “por la idea que se tiene de que el rap habla sobre drogas, sexo, alcohol y todo lo malo”, relata el entrevistado.
Mientras, seguían cantando en el barrio y enfrentando a quienes consideraban que estaban alterando el zapoteco y desaprobaron la propuesta, así que decidieron buscar nuevos espacios para exponer su obra.
En 2014 también se sumó al grupo Lenin, estudiante de una de las secundarias que visitaron, quien los sorprendió porque ya hacía rap.
Actualmente tienen diversas composiciones, aunque no todas están grabadas. En redes sociales han publicado entre 15 y 20 canciones, mismas que les han abierto espacios y con las que han logrado tener su propio público.
“La gente sabe lo que hacemos, que el mensaje no es nada malo: al contrario, ayuda a los niños a aprender el idioma”.
Para conocer más de su propuesta musical, se les puede encontrar en Facebook como: Juchirap crew; y en YouTube e Instagram como: Juchirap