PUEBLA, MÉXICO.- Los trabajos de restauración y mantenimiento de la fuente de San Miguel concluyeron, por lo que una vez que el paso a la plancha del zócalo sea abierto se podrá apreciar a detalle el atractivo turístico y uno de los sellos de identidad de la ciudad de Puebla.
Uno de los elementos distintivos de la restauración fue regresarle la espada de hierro forjado y su cadena a San Miguel Arcángel, que en la década de los 80, durante una remodelación, le fue retirada y sustituida por una de cemento que tras el paso del tiempo se dañó.
Para reintegrar el elemento se hizo un estudio foto-histórico e iconográfico para la colocación de la espada.
Asimismo se hizo reintegración de elementos y limpieza, proceso que llevó más tiempo debido a que la fuente ha sido abastecida con agua de riego se generan sales y elementos biológicos que se adhirieron a la piedra hasta formar una costra biológica de tres milímetros de espesor.
Ahora, tras la intervención de diez restauradores los detalles pueden ser apreciados en su totalidad.
EL APUNTE
La espada de cemento quedará a resguardo del INAH como parte de una restauración anterior.