PUEBLA, MÉXICO.- Pese a controversias sobre la instalación de la réplica de la Capilla Sixtina en el atrio de la Catedral de Puebla, este fin de semana cerca de 50 mil personas visitaron la copia de la joya arquitectónica construida entre los años 1475 al 1481 en el estado Vaticano.
Lo anterior, toda vez que el director del proyecto, Antonio Berumen habría señalado que en promedio se tenía contemplada la entrada de 600 personas cada 15 minutos, lo que se traduce en 25 mil personas por día.
En la exposición se reproducen más de 2 millones 700 mil fotografías, conformadas en un archivo digital; el recorrido de aproximadamente 45 minutos cuenta la historia de Miguel Ángel y del Papa Julio II y del Papa Pablo III así como la historia del inmueble a través de material audiovisual.
Fue durante su inauguración que se llevó a cabo este fin de semana que el secretario general de los Museos del Vaticano, Roberto Romano, resaltó el hecho de poner al alcance de la comunidad esta gran obra porque representa un acontecimiento importante para el gremio católico; a la par, dijo que la Capilla Sixtina no sólo es una obra de arte, sino que es un “mensaje de belleza, amor, armonía y de esperanza que Dios ha querido donar a cada uno de nosotros”.
Mientras tanto, el gobernador Miguel Barbosa Huerta hizo énfasis en el apoyo que se tuvo por parte del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) luego de que suspendió los trabajos por un par de horas por falta de permisos:
“Por habernos permitido que en el centro histórico que en este atrio de la Catedral se pudiera instalar esta reproducción de la Capilla Sixtina, ya que es una gran oportunidad de disfrutar de arte, de una muestra la máxima muestra de creatividad del hombre”.
LOS PROBLEMAS
Durante la instalación de la réplica, la obra fue suspendida sólo unas horas por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) por violaciones a la Ley Federal sobre Monumentos y Zonas Arqueológicas, tras lo cual el director del proyecto, Antonio Berumen, señaló que ya se habían entregado los papeles correspondientes y se vio que la continuidad del proyecto estuviera en orden.
Además aclaró que la misma no provocaría daños en el inmueble histórico de carácter religioso donde fue instalado, pues está diseñada para ser trasladada y sin afectaciones; en dado caso, se cuenta con un seguro.
Sin embargo, fue posterior a la suspensión del INAH que el Comité Defensor del Patrimonio Histórico hiciera una solicitud de cancelación de la obra por las afectaciones que pudiera tener. En ese sentido, la Gerencia del Centro Histórico que preside María Graciela León Matamoros, a través de una carta aclaratoria dirigida a Rosalva Loreto López, presidente del Comité Defensor del Patrimonio Histórico, indicó que no se había ingresado ningún expediente o trámite de opinión técnica y o solicitud de factibilidad técnica, por lo que “desconocemos los alcances de este armado de la estructura en el atrio de la Basílica de Catedral”.
