MÉXICO.- Aunque el riesgo actual para la salud pública en México por la influenza H5N1 (anteriormente conocida como influenza aviar) es bajo, expertos prevén que este tema cobrará relevancia durante 2025 debido a su potencial impacto en la salud humana, animal y la producción alimentaria, informó Mauricio Rodríguez Álvarez, vocero del Programa Universitario de Investigación sobre Riesgos Epidemiológicos Emergentes (PUIREE) de la UNAM.
El pasado 6 de enero, el Departamento de Salud de Louisiana, en Estados Unidos, reportó la muerte de un paciente de 68 años debido a influenza aviar altamente patógena (HPAI), contagiado tras la exposición a aves silvestres y de traspatio. En México, por el momento, no se han registrado casos en humanos o animales, aunque autoridades sanitarias y agropecuarias han reforzado la vigilancia, especialmente en puntos donde llegan aves migratorias provenientes de Norteamérica.
Rodríguez Álvarez recordó que México cuenta desde 2006 con el Sistema de Vigilancia Centinela para monitorear infecciones respiratorias. Este sistema permite identificar virus como los de la influenza, coronavirus, y otros, y es clave para detectar posibles brotes.
Cambios preocupantes en los virus de influenza
El experto subrayó que durante 2024 se observaron modificaciones importantes en el comportamiento del virus H5N1, que pasó de estar confinado a aves a infectar mamíferos, incluyendo vacas lecheras en Estados Unidos. Esto ha generado afectaciones a la industria de la leche y declarado emergencias en estados como California, donde también se detectó transmisión secundaria a otros animales como gatos.
“Esto muestra un patrón de evolución del virus que requiere una vigilancia rigurosa, especialmente en el ganado lechero y animales de traspatio”, explicó Rodríguez Álvarez.
Medidas de prevención
El especialista recomendó consumir únicamente leche pasteurizada y sus derivados para evitar riesgos de contagio, así como reforzar la vacunación contra la influenza en personal que trabaja con animales, al menos con la vacuna estacional, debido a la posible protección cruzada.
También llamó a los trabajadores de granjas a reportar cualquier enfermedad respiratoria y la presencia de animales enfermos a las autoridades correspondientes. “Es crucial identificar si los virus detectados son de alta patogenicidad, como los subtipos H5N1, H5N2 o H7N3”, afirmó.
Contexto regional y vigilancia transfronteriza
Debido al intercambio de ganado lechero entre México y Estados Unidos, especialmente de estados como California y Texas, el monitoreo constante es esencial para evitar la propagación del virus.
Rodríguez Álvarez concluyó destacando la importancia de mantener una vigilancia activa y estar preparados para cualquier cambio en el panorama epidemiológico: “No se trata de alarmar, sino de vigilar y actuar con anticipación”.
Con información de UNAM
