PUEBLA, MÉXICO.- Los caricaturistas mexicanos fueron capaces de construir una narrativa política a través de la gráfica al entender que la imagen tiene un alto poder de comunicación y la capacidad de contener ideas, aseguró el reconocido caricaturista Rafael Barajas, “El Fisgón”.
Al impartir la conferencia “La historia de la caricatura política en México”, como parte de la segunda edición de la Cátedra de Artes de la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP), el monero aseguró que el arte sí puede cambiar al mundo, empezando porque los caricaturistas mexicanos pudieron, desde la gráfica, poner en cuestión a todo un régimen.
“El arte sí puede cambiar al mundo, pero no es necesariamente el arte estéticamente puro, porque los caricaturistas del hijo del Ahuizote y El Colmillo Público que cambiaron a la sociedad mexicana justamente repudiaban la idea del arte por el arte, pero generaron la primera gran revolución social del siglo XX, lo cual, no es poca cosa”.
Relató que a lo largo de su trayectoria en la gráfica sus caricaturas han cambiado, pues en un principio había temas que no podía abordar abiertamente; en ese sentido enfatizó que el margen de libertad que tiene una sociedad lo da el medio que se atreve a ir más lejos, por lo que “nuestra tarea fue empujarla lo más lejos posible”.
Durante la última charla del ciclo -en el que también participaron autores como Elena Poniatowska, Betsabeé Romero, Felipe Leal, Mario Espinosa, Horacio Franco, Cecilia Lugo y Rafael Barajas- dijo que ejemplo de ello es la lucha de la prensa mexicana que nació como una “prensa de combate”, la cual peleó por el derecho a la libre expresión que la ha logrado en al menos dos ocasiones.
La primera del mundo colonial al triunfo liberal, la segunda, en el lapso del cambio de gobierno entre Salinas de Gortari y Zedillo, cuando El Fisgón junto a otros caricaturistas como Eduardo del Río “Rius”, iniciaron la revista El Chahuistle después El Chamuco.
“Publicamos caricaturas super agresivas contra Salinas y Zedillo, es más el criterio que teníamos era que si nos escandalizaba a nosotros pues tenía que ser publicada, entonces cuando Zedillo llegó a la presidencia ya le habíamos dicho de todo y ya para que nos censuraba”.
ERA DIGITAL
En otro tema, expresó las ventajas que han traído las nuevas herramientas digitales que le han permitido incursionar en otras áreas, como la animación, circunstancia “absolutamente impensable” en el México de 1980: “En la era digital la caricatura es uno de los géneros periodísticos que se adecuaron bien al cambio, me atrevo a decir incluso que hoy en día mi caricatura es mucho más vista en Twitter que en el periódico impreso”, explicó.
Moisés Rosas, asesor cultural de la UDLAP, destacó la historia de la caricatura en México por ser un tema fundamental por la lucha contra la censura y la defensa de la libertad de expresión en el país.