PUEBLA, MÉXICO.- La captura del exgobernador Mario Marín Torres abre las puertas a un momento de “enorme corrupción” que permitirá la indagación de otras supuestas faltas, por lo que el gobierno del estado formará “parte activa” en las investigaciones de quien tendría orden de aprehensión por el delito de tortura contra la periodista Lydia Cacho.
Así lo refirió esta mañana el gobernador Miguel Barbosa Huerta, quien señaló que para hoy están prescritos muchos de los delitos que habría cometido el examnadatario priista, retenido por elementos de la Fiscalía General de la República (FGR) a 15 años de los hechos en agravio de la autora de Los demonios del Edén.
“Muchas cosas van a salir, nosotros vamos a ser parte activa en esa investigación. La definición es la captura de Mario Marín, abre, abre la puerta a que se investigue mucho más de las causas del proceso por el cual hoy está detenido allá en Cancún, abre un momento de enorme corrupción”.
Barbosa Huerta señaló que tendría que ser investigada no sólo la violación a derechos humanos en contra de Lydia Cacho, sino también otras faltas administrativas y “cosas increíbles”, como una supuesta “enorme fortuna” de Mario Marín puesta en manos de prestanombres en Puebla y de “hombres corruptos, igual que él” en otras partes del estado.
“¿No creen que debe saberse, no creen que debe saberse quiénes son los prestadores de Mario Marín y cuál es la historia que rodeó a ese momento político y social en nuestro estado?”, cuestionó al respecto el actual titular del Ejecutivo estatal.
Aseguró que el gobierno del estado será “parte activa” en las investigaciones en contra de quien fuera su homólogo en el periodo comprendido entre 2005 y 2011, y mayormente reconocido como “El Gober Precioso”.
Asimismo, Miguel Barbosa enfatizó durante su conferencia matutina que tendría que descubrirse ese “momento tan jodido” de la política en Puebla:
“No podemos volver a las prácticas del pasado de mentir, mentir, mentir, mentir, simular, tiene que ser así. Entonces, yo creo que van a conocerse muchos hechos y vamos a ser nosotros parte de esa investigación; sí, porque la política lo que quiere es que se levante la alfombra y que la basura se esconda abajo de la alfombra y todos callados y ya muchos ricos, millonarios, ‘ja ja ja’. No, claro que no, claro que no. Ese momento tan jodido de la vida política de nuestro estado y siguientes años tiene que descubrirse”.
A RECORDAR
Fue en 2006 cuando el entonces gobernador de Puebla, Mario Marín, se vio envuelto en un escándalo público a nivel nacional al revelarse una serie de grabaciones telefónicas entre él y el empresario textil Kamel Nacif, cuando le mostró su apoyo para imponer un “correctivo” a Lidya Cacho.
Nacif habría presentado los cargos de difamación y calumnias en contra de la periodista tras que ella expusiera en su libro Los demonios del Edén su participación en una red de explotación y prostitución infantil.
“Pues ya ayer le acabé de darle un pinche coscorrón a esta vieja cabrona. Le dije que aquí en Puebla se respeta la ley y no hay impunidad y quien comete un delito se llama delincuente. Y que no se quiera hacer la víctima y no quiera estar aprovechando para hacerse publicidad. Ya le mandé un mensaje a ver cómo nos contesta. Pero es que nos ha estado jode y jode, así que se lleve su coscorrón y que aprendan otros y otras”, es parte de lo que dijo en ese entonces Marín en conversación con Nacif.
