MÉXICO.- Desde octubre de 2024, Anel Nochebuena Escobar, directora del Instituto Municipal de Arte y Cultura de Puebla (IMACP) y exdirectora de Museos Puebla, interpuso una denuncia penal por posibles actos de corrupción en la rehabilitación del Complejo Museístico La Constancia Mexicana.
El martes, la exfuncionaria del gobierno de Sergio Salomón Céspedes explicó que los presuntos actos de corrupción ocurrieron en 2021, cuando se llevaron a cabo trabajos de rehabilitación tras las inundaciones provocadas por el desbordamiento del río Atoyac.
Según Nochebuena Escobar, la Secretaría de la Función Pública detectó anomalías en las obras realizadas, lo que llevó a la apertura de una auditoría. Estas irregularidades habrían sucedido durante la administración del exgobernador Miguel Barbosa Huerta, y fueron notificadas en el proceso de entrega-recepción a su sucesora, María José Farfán, actual directora de Museos Puebla.
El actual gobernador de Puebla, Alejandro Armenta Mier, reconoció en conferencia de prensa que existió corrupción en el Complejo Museístico La Constancia Mexicana y aseguró que el ilícito ya está bajo investigación.
El escándalo salió a la luz luego de que se cuestionara sobre una nueva rehabilitación del complejo, a solo cuatro meses de haber sido remodelado con una inversión de 50 millones de pesos.
A RECORDAR
La Constancia Mexicana es un centro cultural inaugurado durante la gubernatura de Rafael Moreno Valle y es sede de cuatro museos estatales: el Museo del Títere Mexicano, la Casa de Música de Viena, el Museo Infantil de La Constancia y el Museo de la Música Mexicana “Rafael Tovar y de Teresa”.
Originalmente, el inmueble albergó la primera fábrica textil del país en la Era Industrial, fundada por Esteban de Antuñano y Gumersindo Saviñón. A finales del siglo XIX, tras huelgas obreras, la familia Barbaroux entregó la fábrica a los trabajadores como pago de finiquito, manteniéndose bajo gestión obrera hasta finales del siglo XX.
Durante el gobierno de Melquiades Morales, la exfábrica fue expropiada para convertirla en el Museo de la Memoria Textil de Puebla, pero fue hasta la administración de Moreno Valle que se consolidó como complejo museístico en colaboración con el Conaculta, Fundación Azteca y el gobierno estatal de Puebla.