PUEBLA, MÉXICO.- Apenas entre un 10 a 15 por ciento de las cien películas que en promedio produce México al año se logran exhibir en salas de cine, indicó el director mexicano Erik Mariñelarena Herrera.
El catedrático de la Licenciatura de Cine y Producción Audiovisual de la Universidad Popular del Estado de Puebla (UPAEP), indicó que el país se encuentra en la posición número 17 en cuanto a producción audiovisual, aunque irónicamente la audiencia mexicana es el tercer mercado más importante a nivel mundial en cuanto a consumo de cine.
En conferencia de prensa virtual, el académico recordó las dificultades para el desarrollo de la industria, como el recorte por parte del gobierno al área de cultura que golpeó directamente al terreno de la cinematografía.
Aunado a ello, las audiencias en salas de cine disminuyeron por la contingencia sanitaria del Covid-19, lo que provocó que la industria cinematográfica se viera reducida en volumen en cuanto a producción y exhibición, además de que mucha gente que anteriormente se dedicaba al cine tuvo que mudarse a otras áreas de la industria.
La llegada de la pandemia, añadió, redujo la posibilidad de ocupar espacios de exhibición ya que los cines permanecen cerrados y en los pocos que están abiertos buscan lugar las películas norteamericanas, europeas y sudamericanas que dejan menos posibilidades a las películas mexicanas.
Mariñelarena Herrera ejemplificó la complejidad para la exhibición con el caso de las películas norteamericanas, las más vistas en todo el mundo con costos de producción entre los 200 o 300 millones de dólares con montos de recaudación de hasta mil millones en taquilla, mismas que en estos tiempos de contingencia sólo han llegado a recaudar un 30 por ciento de dichos números.
De acuerdo con datos de la Cámara Nacional de la Industria Cinematográfica (CANACINE), entre marzo y noviembre de 2020 se registraron pérdidas por más de 15 mil millones de pesos, destacó Omar García Macías, catedrático de la misma licenciatura en dicha universidad.
Esta situación, continuó, provocó el cierre de salas pero abrió nuevas posibilidades para dar paso al streaming, canales vía internet, entre otras opciones de exhibición en línea o por televisión como las grandes empresas de Universal Studios, Disney o HBO.
Aplaudió que la misma situación de la pandemia orilló a que se abrieran estas nuevas ventanas de exhibición, que han permitido que la audiencia se mude de la sala de cine a sistemas en línea, con lo cual se genera un aumento en la producción de películas y series para estas plataformas y abriendo nuevos espacios de trabajo.
De igual modo, la académica Shaiko Rivero González celebró que los canales de streaming aumentaron ventas de manera significativa, permitiendo a los jóvenes creadores utilizar herramientas a su alcance como establecer locaciones en los espacios de la casa, adaptarse a distintos materiales y grabar sus contenidos en plataformas como YouTube.