- Desde su estreno esta obra fue incomprendida y enmascara un feminicidio, revela crítico musical
MÉXICO.— Aunque “Carmen” es una de las óperas más conocidas y representadas en todo el mundo, ha habido una lectura equivocada sobre sus personajes y la historia, que al hablar de un crimen pasional ha velado el asesinato de una mujer a manos de su pareja, refirió Gerardo Kleinburg.
Durante la charla “Carmen: ¿gitanería o feminicidio?” como parte del ciclo Hablemos de Ópera, el crítico musical discurrió por esta pieza dramática y la historia de su autor Georges Bizet, un músico prodigioso y un fenómeno pianístico, estimado por el propio Franz Liszt como un talento que se da sólo una o dos veces en la historia.
Señaló que desde su estreno la obra fue incomprendida y considerada como una rareza, generando animadversión entre el público, la critica y los colegas mismos, quienes no entendían lo que el autor había querido decir, y quien murió considerando que su obra había sido un completo fracaso.
Explicó que una de las sorpresas de esta ópera —basada en la novela Carmen de Prosper Mérimée— es que fue escrita, designada en su titulo y escenificada dentro de la ópera cómica, algo que parecería incomprensible por su naturaleza dramática, pero que obedece a su estructura con fragmentos cantados y hablados.
“Carmen” es considerada por muchos como la piedra fundacional del verismo operístico, al lado de las piezas de Puccini, Verdi y otros autores, al tratar una historia de un profundo realismo con un triangulo amoroso, historias de bandoleros y los bajos fondos del círculo gitano, un teatro humano en el que hay un sinnúmero de historias trágicas, delictivas, de seducción y traición”.
Sostuvo que aunque la historia de Bizet fue suavizada con un tinte de gitanería, este es sólo es un pretexto para velar la connotación sangrienta y brutal del asesinato, ya que no puede dudarse que enmascara un feminicidio a manos de un hombre que no supo soportar que su amada fuera libre; un personaje único y extraordinario en la historia de la ópera, una mujer con convicción como lo fueron Salomé, Lulú y Violeta.