MÉXICO.- El presidente de la Sociedad Mexicana de Psicología, Alejandro Zalce Aceves, consideró que el candidato que sepa tocar la fibra emocional del pueblo es el que ganará las próximas elecciones a la Presidencia de la República.
Ante estudiantes y docentes de la Universidad del Valle de México Campus San Rafael, señaló que, por lo general, la gente se va por lo que siente, por lo que transmite la persona en su nivel emocional, “no se van a las propuestas, por eso creo que el abanderado que sepa manejar la parte emocional del pueblo es quien va a ganar”.
Indicó que actualmente, la psicología juega un rol muy importante en la ciudadanía y en los propios candidatos, “si nos hubieran consultado a tiempo, cualquiera de ellos a lo mejor ya hubiera ganado desde hace rato”.
Durante su ponencia El perfil psicológico de los candidatos a la “Presidencia de México. Estrategias para una decisión inteligente 2, insistió en que estos comicios son diferentes a los pasados, ya que la gente no se irá por la imagen física, sino por la parte emocional.
El doctor Zalce Aceves subrayó que además de la parte emocional, cada uno de los aspirantes debe tener un modelo, un perfil que debe cumplir como candidato a la Presidencia del país.
Debe tener la capacidad de analizar, de evaluar, de hacer detección de necesidades, pero la parte más importante, que tenga una habilidad de toma de decisiones, pronta, expedita y asertiva, apuntó.
“Esta condición tiene que ir basada en habilidades sociales, que se pueda relacionar con todo tipo de personas, que pueda comunicarse en todos los niveles, que tenga habilidades de negociación, de solución de problemas; habilidades también en cuanto a estado anímico, que sea lo más estable y pueda aceptar la crítica”, dijo el experto.
Finalmente, expresó que no es fácil ocupar la silla presidencial, por lo que quien llegue tiene que ser alguien con alta tolerancia a la frustración, con alta tolerancia al trabajo y a la jornada ruda, y, sobre todo, con los pies en la tierra, de que eso es sólo un trabajo, que está de paso y que el poder no se va a quedar en él, se va a regresar al pueblo.
