PUEBLA, MÉXICO.- Más de una decena de reos comparte una pequeña habitación en Filipinas, sus cuerpos apenas y se distinguen unos de otros; la piel, el sudor, las paredes y las expresiones faciales emulan a una pintura impresionista.
Se trata de la fotografía de Noel Celis, ganadora del tercer premio individual en la categoría de “Noticias de Actualidad” en el World Press Photo, misma que ya se exhibe, junto a 142 fotografías, en la Galería de Arte del Palacio Municipal de Puebla.
El trabajo de Noel explora una de las prisiones más sobrepobladas de Filipinas, que alberga a 3 mil 800 presos. El problema en las cárceles se agravó luego de que el actual presidente de ese país, Rodrigo Durtete, anunciara una “guerra contra el narcotráfico”.
Bajo estas historias periodísticas es que se construyen las 143 fotografías ganadoras del World Press Photo, y aunque cada una de ellas hace historia y cuenta los hechos más relevantes a nivel mundial, también está la parte tecnológica y artística en cada una de estas imágenes.
En entrevista, Sophie Boshouwer, una de las curadoras de esta exposición y juez del concurso, compartió que la fórmula para elegir las obras contiene un 50 por ciento de técnica y otro 50 por ciento de discursos que se involucran con la actualidad.
En esta ocasión los temas que se abordaron tuvieron que ver con el inminente cambio social de Cuba tras la muerte de Fidel Castro, pero también está la rama de las redes sociales, las interminables guerras, la contaminación, la migración, los nuevos héroes deportivos y la vida cotidiana.
Para Boshouwer, las fotografías que pasan el filtro del World Press Photo deben tener la habilidad de convertirse en piezas icónicas. Es requisito, dijo, que las imágenes se conviertan en libros de antropología que expliquen en un futuro la vida política y social del ser humano.
IMPACTO E INMEDIATEZ
De las fotografías que se exponen la que más ha llamado la atención y causado interminables discusiones es “Un asesinato” en Turquía, del reportero Burhan Ozbilici, quien tuvo la habilidad de tomar la imagen justo cuando Mevlüt Mert Altintas asesina al embajador ruso, Andrey Karlov.
La fotografía que muestra a Mert Altintas con un arma de fuego en su mano derecha, gritando “Dios es grande” a lado del cuerpo del embajador, se hizo viral en un instante en todo el mundo. El medio fueron las redes sociales, por lo que para el jurado del World Press Photo, esta fotografía es el reflejo más claro de este siglo, al rebasar la inmediatez digital.
Sophie Boshouwer refirió que uno de los tópicos más importantes para la curaduría de este año fue la libertad de expresión, un derecho que mantiene muchas lecturas y que se codea con la ética periodística. Recordó las discusiones que se han generado en ediciones pasadas a partir de trabajos que fueron capturados en situaciones de guerra, en las que el fotógrafo ha optado por capturar el instante a intentar salvar al individúo que se retrata.
MÉXICO Y LA LIBERTAD DE EXPRESIÓN
En la actualidad el país enfrenta una crisis en cuanto a violencia en contra de periodistas; desde el año 2000, 105 han sido asesinados y en lo que va del año se han reportado nueve casos. Estas cifras las tiene presentes el World Press Photo al hacer una gráfica de los focos rojos mundiales para ejercer el fotoperiodismo.
Boshouwer lamenta que el 99.75 por ciento de estos casos documentados desde hace dos décadas estén impunes, por lo que insiste en que la libertad de prensa es un derecho que debe exigirse tanto en México como en el resto de los países.
Aseguró que el World Press Photo busca este 2017 hacer conciencia sobre la labor periodística, la cual debe estar protegida con todas las mismas garantías de cualquier otro trabajo.
La exhibición del World Press Photo en la Galería de Arte del Palacio Municipal permanecerá abierta al público hasta el 25 de agosto.