WASHINGTON.- El gobierno del presidente Donald Trump anunció hoy “tolerancia cero” contra la violencia de las pandillas y responsabilizó a su antecesor Barack Obama por la proliferación de pandilleros de la llamada Mara Salvatrucha o MS-13.
“Las débiles políticas migratorias de la administración Obama permitieron que se formaran malas pandillas en ciudades de todo Estados Unidos. Las estamos removiendo rápido”, escribió Trump en su cuenta de Twitter poco antes de un anuncio oficial del Departamento de Justicia.
Trump emitió en febrero pasado una orden ejecutiva que instruyó a las agencias federales a desmantelar a las organizaciones criminales transnacionales.
Durante un evento del Consejo sobre Crimen Organizado del Departamento de Justicia, el procurador general Jeff Sessions prometió una política de “tolerancia cero” contra la violencia pandilleril durante la era Trump y acusó a las ciudades santuario de albergar pandilleros.
“Las organizaciones criminales transnacionales como MS-13, representan una de las más serias amenazas a la seguridad de Estados Unidos. Estas organizaciones se enriquecen pedaleando veneno en nuestras comunidades, traficando niños para explotación sexual e infligiendo violencia horrenda”, señaló Sessions.
Estados Unidos estima que la MS-13 dispone de un ejército de 30 mil miembros a nivel internacional, 10 mil de los cuales residen en 40 de los 50 estados de Estados Unidos, lo que según el Departamento de Justicia marca un incremento en relación con años anteriores.
Sessions señaló que la política de “frontera abierta” y “relajado cumplimiento migratorio” permitió a la MS-13 enviar tanto reclutadores como a miembros para regenerar las pandillas que iban en declive.
El procurador de Justicia atribuyó a miembros de la MS-13 la muerte de cuatro jóvenes en Long Island hace unos días, así como de dos niñas asesinadas con machetes y bates de beisbol en Los Angeles.
Hace unas semanas, la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) agregó a un miembro de la MS-13, el hondureño Walter Yovany Gómez, a su lista de los 10 Fugitivos Más Buscados, por su presunta responsabilidad en un asesinato.
Sessions aprovechó el foro para criticar a las llamadas ciudades “santuario” que rehúsan cooperar con las autoridades federales cuando inmigrantes indocumentados están detenidos sin haber cometido delitos graves.
“Albergar inmigrantes criminales sólo ayuda a las pandillas violentas como la MS-13. Las ciudades santuario están ayudando a estos cárteles a regenerar sus filas y poner vidas inocentes en riesgo”, señaló Sessions.