Fotografía: Tania Olmedo / EsImagen

Editan libro de memorias pero, ¿se aprovecharon del “tiempero” del Popocatépetl?

En ESPECIALES Janet González Jiménez

PUEBLA, MÉXICO.- “Soy tiempero de Santiago Xalizintla. Soy el único con este don que Dios me dio. El único porque  soy nativo de allí; allí nací, allí crecí y allí me voy a morir. Me gusta sembrar maíz, cosechar y trabajar, soy campesino. Don Goyo  (volcán Popocatépetl) me tiene que avisar cuando sea la hora porque yo soy su mensajero, cuando ya me llame Dios. Yo no cobro ni un centavo, quienes lo hacen son los mayordomos de Xalizintla, pero el dinero se va a acabar porque cada quien antes de irse va a ir pagando lo suyo”, fueron las palabras de Antonio Analco Sevilla durante la presentación del libro Lectores de la Naturaleza. Memorias de un hacedor de lluvia, que supuestamente recoge las memorias de este tiempero.

Antonio Analco Sevilla, quien asegura que desde hace casi 50 años se ha dedicado a llevar ofrendas al Popocatépetl cada 13 de marzo para celebrar su cumpleaños, denunció que entregó 25 mil pesos a Alberto Diez Barroso Repizo —que en 2014 fue jefe de la Unidad Regional Puebla de Culturas Populares (URPCP)—, quien le prometió escribir un libro sobre sus memorias.

Fotografía: Janet González

Detalló que Diez Barroso fue dos veces a su casa a entrevistarle y no volvió a verle pues siempre que lo buscaba le decía que andaba en la Sierra. Hasta el día en que Diez Barroso le avisó que “ya estaba el libro”.

El año pasado, Alberto Diez Barroso publicó Lectores de la Naturaleza. Memorias de un hacedor de lluvia. El tiraje constó de 700 ejemplares y cien de ellos los repartió entre los colaboradores que aparecen en el libro. Asimismo en la portada aparecen él y don Antonio Analco como coordinadores del libro.

Sin embargo, el también agricultor y campesino de Xalizintla, Antonio Analco Sevilla aseguró que fue una gran sorpresa enterarse por sus hijos que revisaron el libro que no se trataba sobre sus memorias, y que sólo contiene un capítulo de unas cuantas hojas llamado “Memorias de un hacedor de lluvia” firmado por él y con una dedicatoria que jamás escribió.

También añadió que no fue coordinador del libro y que la idea principal era plasmar sus memorias, pues nunca se enteró de que habría otros textos incluidos, además de no conocer al resto de colaboradores que allí aparecen.

No sólo eso, sino que también desconocía el hecho de que Diez Barroso Repizo presentaba el libro Lectores de la Naturaleza. Memorias de un hacedor de lluvia en el marco de la XXX Feria Nacional del Libro BUAP y que estaría acompañado de tres de los colaboradores, además de que nadie le hizo llegar una invitación a una presentación en la que estaba anunciado.

“ÉL ME INVITÓ”

En entrevista, Alberto Diez Barroso Repizo declaró al respecto: “Don Antonio nos invitó a mí y a varios de los autores a participar en la edición de un libro. Tengo la invitación por escrito de él para apoyarlo y coordinar este trabajo”.

Diez Barroso, antropólogo y ex titular de la Unidad Regional Puebla de Culturas Populares, dijo desconocer el proyecto y los objetivos para la realización de este libro que tuvieron su origen debido al Programa de Apoyo Culturas Municipales y Comunitaria (Pacmyc), de la Dirección General de Culturas Populares y al Consejo Estatal para la Cultura y las Artes, así como también negó haber recibido los 25 mil pesos para imprimir las memorias del “tiempero”.

“Él me invitó a que lo apoyara con la realización de este libro. Todas las grabaciones que realicé se pudieron compilar en el texto de don Antonio. Lo que se entrevistó fue lo que se puso allí. Posteriormente le propuse la participación de otros antropólogos  con el tema para enriquecer el trabajo, porque el material que teníamos no daba para realizar un libro completo”, dijo Alberto Diez.

AÚN HAY MÁS

Durante la presentación del libro, Oswaldo Camarillo Sánchez, autor de “La sacralidad y el simbolismo del territorio. Elementos para su comprensión y defensa: ejemplos en el caso de México”, capítulo que aparece en Lectores de la Naturaleza. Memorias de un hacedor de lluvia; dijo en su discurso de presentación: “Muy buenas noches. Muchas gracias por la invitación a presentar este libro. Muchas gracias a ustedes que nos están escuchando. Agradezco mucho la invitación de Adalberto Diez Barroso, la invitación a presentar un pequeño ensayo, un pequeño artículo que habla de la sacralidad y el simbolismo del territorio…”

Por su parte, Sergio Suárez Cruz dijo en el mismo tenor: “En principio, debo agradecer a Alberto con el que tuve contacto, creo que fue el año pasado, a mediados o algo así, invitándome a colaborar en el trabajo. Realmente de mi parte era algo que ya había realizado del 2000 al 2004 haciendo mi tesis de doctorado y se tomó como tema la Malinche y el culto a los cerros…”

Estas palabras corroboran el hecho de ninguno de estos colaboradores fue invitado por don Antonio Analco, sino que fue Alberto Diez Barroso Repizo quien los invitó a colaborar con un texto para la realización de este libro.

Diez Barroso, al presentar el libro puntualizó: “Lo que  un servidor ha buscado ha sido que  don Antonio sea el protagonista de su propio trabajo, de las investigaciones que giran en torno a su trabajo… Parte de la ética es reconocer a los hombres de conocimiento en el lugar que se merecen”.

“AQUÍ FALTA MUCHO”

El “tiempero” miró una y otra vez el libro Lectores de la Naturaleza. Memorias de un hacedor de lluvia, y afirmó que la foto donde aparece él y su esposa y el breve texto que aparece firmado con su nombre es lo único que forma parte de sus memorias.

“Aquí falta mucho, yo no dije sólo esto. Dije mucho más y no está todo. Esto es muy poquito”.

Añadió que lo único que desea es contar su historia, que se reconozca su labor como “tiempero” de la comunidad de Santiago Xalizintla desde hace más de 50 años, además de que los mayordomos, quienes tomaron una posición de poder al entregárseles recursos externos a la comunidad, le impiden hacer su trabajo, pues desde el pasado 13 de marzo surgió un rumor que ellos cobraron para llevar las ofrendas al volcán.

“Fueron el mayordomo Víctor Soto de Olarte y Fermín Sevilla Roque quienes llevaron gente engañándolos que eran los encargados oficiales de la ceremonia y de dejar la ofrenda a Don Gregorio… Yo hablo con el volcán. Es un don que nos da Dios, y quienes nacemos con ese don, no lo hacemos para cobrar”, dijo Analco Sevilla.

Concluyó  que desconoce qué pretende Alberto Diez Barroso al presentar un libro a sus espaldas, que  no habla de sus memorias, que no coordinó, ni dedicó y en el que se incluyen textos de colaboradores con los cuales nunca tuvo algún tipo de acercamiento, por lo que no entiende cómo es que un libro que pretendía ser de sus memorias y para el cual pagó terminó siendo una compilación de diferentes artículos y autores.

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